miércoles, 5 de agosto de 2009

cagarse en la utopía

Si le quitáramos el tapón al mar de lágrimas. Si removiéramos el velo de los ojos del revólver. Si apaciguáramos la sed, si le quitáramos las uñas y las raíces. Si sólo dejáramos el esqueleto plantado en aquella maceta de sueños. Si no nos moviéramos más y necesitáramos menos efervescentes. Si ser humano no fuese esa violencia disfrazada de libertad. Si eso pasara no habría este mundo, ni aquel.

1 comentario:

Adrián Naranjo dijo...

Che, you left me spinning with this one.
Buenísimo.
Saludos!